Gina Lollobrigid: Una mujer versátil
Italia tiene grandes ejemplos de mujeres que han logrado cultivar unas historias fascinantes, entre ellas se puede destacar la historia de Gina Lollobrigid.
Es nacida el día 4 de julio de 1927, y falleció el 16 de enero de 2023 con noventa y cinco años de edad en su país.
Gina Lollobrigida es conocida en Italia por su prolífera carrera en el mundo de la actuación y fue una destacada mujer en la política.
Hablar de la vida de esta gran mujer es mostrarla desde el carisma, reconocimiento y templanza que irradiaba desde sus actuaciones.
Como actriz es recordada por lograr diferentes reconocimientos entre ellos se puede destacar:
Premio David de Donatello, perteneciente a la Academia de Cine Italiano, donde se valora el talento y el arte en este país.
Igualmente, alcanzó el Globo de Oro, y los premios bambi honraron el trabajo de Gina en siete oportunidades.
Del mismo modo, fue reconocida en el Festival Internacional de Berlín, Henrieta.
Es importante destacar, que el Paseo de la Fama de Hollywood también tiene una estampa de Gina Lollobrigid, en favor de reconocer su vida y legado en esta industria.
Una mujer, una historia
Gina Lollobrigid, es de esas mujeres que logró trascender y se proyectó en un mundo competitivo, en tiempos posteriores la II Guerra Mundial.
La historia de esta fascinante mujer empoderada para su época inicia en el seno de una familia humilde que confió en ella y le permitió estudiar en la Academia de Bellas Artes de Roma.
En este importante lugar puedo especializarse en la pintura y escultura, conocimientos y experiencias que salieran en la madurez de su vida.
Del mismo modo, sintió gusto por la ópera, pero se vio obligada a trabajar para suplir necesidades familiares.
Entre sus primeros trabajos fue en la industria de las telenovelas que para el momento era un mundo exitoso.
La presencia de esta mujer y su belleza en las fotonovelas fue toda una sensación en la Italia del momento.
Cabe desatacar, que en la Italia del momento se admiraba mucho a las mujeres que poseían pechos grandes, caderas grandes y ojos llamativos.
Ciertamente, el portar estas cualidades femeninas la hizo pertenecer a este grupo de mujeres que lograron destacarse.
Aunque su trabajo fue siempre su mejor carta de presentación en la industria cinematográfica en todo el mundo.
La presencia de esa imbatible mujer se hizo sentir en el certamen de belleza Miss Italia, y allí logró mayor proyección al quedar como tercera finalista.
La industria del cine, un camino al éxito
Las primeras apariciones oficiales de Gina Lollobrigid dieron lugar en el año 1946 de la mano de la producción Águila Negra perteneciente a Ricardo Freda.
Otra de sus grandes participaciones fue en la producción Fanfan, el invencible del reconocido director de origen Fracés Chiristian Jacques.
Gracias a la participación en esta gran historia de amor recreada con la participación Gérard Philipe lograron sensibilizar y generar emociones en el público.
Progresivamente, Gina Lollobrigid logró abrirse camino en Hollywood, y uno de los primeros en recibirla fe Howard Hughes quién logró contratarla por una década.
Aunque lamentablemente, la actriz Gina decidió retornar a su continente y así romper el contrato con la industria estadounidense.
Quizás la mayor limitante fue el conocimiento del idioma inglés.
Afortunadamente, Gina siguió participando en grandes producciones con la dirección de Luigi Comencini en obras cinematográficas como Pan, amor y fantasía del año 1952.
En esta producción representó a Pizzirela, una muchacha un poco rebelde, que impresionaba al jefe de la policía del pueblo quien fue el actor Vittorio de Sica.
A partir de esta producción se genera el mito de Gina Lollobrigid como esa dama campesina, sensual, hermosa que ganó mayor popularidad.
Ciertamente, esta imagen y mito se mantuvieron en el resto de la carrera, apareciendo así en otras grandes producciones cinematográficas como:
La Mujer más guapa del Mundo en el año 1955, perteneciente a Robert Z. Leonard.
Del mismo modo, Nuestra Señora de París en el siguiente año junto a Jean Delannoy y Anthony Quinn.
Así mismo, Salomón y la reina de Saba del año 1958, Desnuda frente al mundo en el año 1960, Buona será, señora Campell en el año 1968.
Una pausa, una evocación del pasado
Durante la década de los años setenta ya la actriz hacia papeles más sencillos, ya la madurez estaba alcanzando la vida de la italiana.
En correspondencia, Gina tomó la decisión de volcar su carrera a lo que fue su principio, en el mundo de las artes, la pintura y fotografía.
Aunque el nombre y estampa de la dama le favorecía para llegar a ocupar estos espacios, siempre esta mujer irradiaba con su inteligencia, sensatez, belleza y sensibilidad cultural.
En algún punto de su nuevo capítulo como artista visual logró la buena crítica en este mundo también altamente competitivo.
Ciertamente, dominaba a la perfección las técnicas asociadas a la creación de imágenes.
Conforme a lo anterior, la fina estampa de Gina quedó en el recuerdo de su fanaticada en apariciones en la serie del caso Falcon Crest.
En Broadway, también participó en la Rosa Tatuada, de Tennessee Williams.
En este orden de ideas, su última participación en la industria del cine sería en Las cien y unas noches del año 1995 junto a la Agnés Varda.
No cabe duda, que las musas del tiempo y el conocimiento del pasado se hizo presente en este capítulo de la vida de Gina Lollobrigida para conquistar nuevos escenarios más culturales.
Quizás las artes plásticas la hicieron mostrarse ante el mundo en su afán por brillar y contribuir con un mundo mejor.
Capítulos de Gina Lollobrigid
Gina no sólo será recordada por su amplia producción cinematográfica, sus obras de arte desde la pintura, escultura y fotografía.
Igualmente, el interés de esta dama por ayudar a otros se hizo sentir cuando de manera voluntaria vendió sus más preciadas prendas.
De esta manera, donó una fuerte suma de dinero para apoyar la investigación en terapia con células madre.
Durante su vida como fotógrafa de prensa logró captar con su cámara a grandes de la historia como:
Paul Newman, Audrey Hepburn, el gran artista Salvador Dalí y de la selección de fútbol de Alemania Federal.
También fue miembro del jurado en el XIX Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar.
Lollobrigida, que en sus últimos años ejerció como embajadora cultural de la república italiana, contrajo matrimonio en dos ocasiones:
Milko Skofic (1949-1968), y con George Kaufman en 1969.
Dentro de la experiencia de esta empoderada mujer logró destacarse en otras labores en la industria cosmética y de las modas.
Fue Embajadora de Buena Voluntad de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Sencillamente, hablar de esta mujer es mostrarla como una mujer guerrera, sobresaliente que supo ganarse el aprecio de sus fanáticos.
En su vida y obra fue arte, cultura, empoderamiento, ejemplo para muchas mujeres que provenían de hogares humildes y transformaron su realidad desde el trabajo.
Sus participaciones en producciones cinematográficas se dan a conocer en tiempos posteriores a la II Guerra Mundial, donde el arte era la oportunidad para resurgir.
Finalmente, la industria del cine despide una gran dama que cautivó generaciones con su fina y elegante estampa.
